Jorge Luis Viveros Caballero
Lic. en Comunicación
Cuando miras el alba de la mañana, yo veo el brillo que hay en tus ojos cuando caminas en direcciones contrarias,
El cantar de tus latidos siempre sigue a mis oídos
Realmente, ¿qué es lo que me hace
estar aquí?
Pensando en alguien como un sueño sin
anhelo caminado por lugares sobre un
mundo paralelo. Sin esperanza alguna
donde ya nada es eterno.
Sé que es tu autenticidad lo que me atrapó
y aunque no lo acepto bajo tu mirada,
sé que yo estoy. Quizás al hablar fue
el peculiar ruido de tus labios o quizás
el sonrojar de tu sonrisa que das a diario.
Irónicamente, he exclamado aquí mi versión.
Pero eso no significa que es mi oposición que, aunque en vientos y señales,
existe la melancolía.
Aun así, no dejo de ver
la calidez de tu bonhomía.
Intento decirte algo con estas hermosas
palabras, pero mi mente hoy viaja devuelta en las andadas.
Aunque tú sin importar
la cris-is sobrepasabas sin dejar tu esencia
y el lado que todos amaban.
Tania Lizbeth Viza Chablé
Lic. en Pedagogía
Cada momento junto a ti es especial
soy tan feliz al tenerte a mi lado.
Sé que me seguirás amando,
cuando te veo me siento ¡fenomenal!
Tus ojos me dicen que no me has fallado
al verme llegar te veo emocionado,
lo que siento por ti es infinito
porque puedo ser yo misma sin ningún
problema.
Puedo decir que ya ¡te amo!
Si tú no estás, me siento en un laberinto.
A tu lado me siento como una preciosa gema
siempre respondes cuando te llamo.
Víctor Abel Mijangos López
Lic. en Comunicación
Para Bo; sueña lindo,
que nosotros soñaremos contigo.
La blancura de tu esencia se tornó amarilla,
y lloraron tus gigantes
al presenciar tu cansancio.
Agitada viste sus rostros crispados,
las voces esforzándose por no romper
la sutileza, hablándote, consolándote.
Había una canción que era tu preferida,
la oíste horas antes del deceso,
y solo tú sabrás con qué canto
te arrulló tu madre.
El cielo se nubló en tu nombre,
Dios tornó las luces de gris,
hoy no hay sol, dijo, hoy no hay solo
porque necesitamos hacer los preparativos
de tu santa llegada.
Cayó el río cristalino,
ya no éramos solo nosotros quienes lloraban,
si no la divina naturaleza que alguna vez
te trajo y a la que hoy vuelves.
Fuiste la blanca belleza que nunca merecimos,
y aunque ahora nuestra mirada es azul,
para ti es el sueño eterno
donde algún día habremos de encontrarte,
ya sin más colores
que el blanco perfecto de tu rizado pelaje.
Missa Yareth de Paz Mendez
Lic. en Comunicación
Eres mendaz
Vas por la vida cuál audaz,
Apetito infinito, ¡hambre voraz!
Y bajo el manto de lo falso
Devoras todo a tu paso
Excusando tus actos
Te escabulles y huyes
Entre risas te diluyes
Tratas de ocultar
Tu verdadera identidad
Esa que no puedes frenar
El deseo te consume
Y a la presa seduces,
Envuelves con palabras vanas
Esta vez,
¿qué disfraz usarás?
Y al caer la tarde en el desván
Ante la duda cederán,
Entre risas
y recelo dejarás
Impregnado un sentimiento
De querer un poco más.
José Manuel López Méndez
Lic. en TICAE
Más allá del horizonte se alza mi anhelo
en un universo infinito me aguarda
mi galardón.
Más allá del horizonte mi destino me llama,
hacia un mundo sin límites
donde mi alma se elevará.
Más allá del horizonte,
mi alma se expandirá,
sin límites
y fronteras al otro lado del sol.
En cada amanecer avanzo sin demora,
con valentía y pasión buscando
llegar más allá,
en un universo tan sublime
donde reina
la quietud y paz.
No hay límites ni barreras que me detengan,
Ni miedos o temores para llegar más allá.
En cada latido de mi corazón
trasciende la ilusión
de volar hacia el firmamento,
donde la aventura comienza
y los sueños se encuentran en armonía.
No hay límites para aquellos que sueñan,
El horizonte se desvanece cuando
la pasión se empeña.
Itzel Yazmin Méndez Hernández
Lic. en Comunicación
Para mí eres y serás un desconocido que jamás le hablaría. Pero un día lluvioso, sin sol, me sentí segura de hablarte, pero no lo hice, el primer día me sentí con nervios y esos nervios se convirtió en pequeños sentimientos por ti
El primer hola que me enviaste en aquel día tan nublado, donde las últimas hojas de los árboles comenzaron a caer por el fuerte viento, me sentí sin alma y sin aliento para responder.
El segundo hola que nos enviamos en aquel día lluvioso, comenzamos a sonreír y a platicar y para la despedida, nos dimos aquel beso de bajo de un árbol lleno de flores amarillas.
El tercer hola fue la despedida de aquel romance fantasioso que he tenido contigo tus besos, tu voz y tu rostro ya no era lo más importante, sino que desperté sin recuerdos tuyos que jamás había tenido.
Diana Susana Hernández Cordero
Lic. en Lengua y Literatura Hispanoamericanas
Crearé un caparazón
si no tengo una familia,
Crearé una espada si no tengo un defensor,
Crearé una vida fuerte para protegerme,
De esta cruda, fría y dolorosa realidad.
El viento será mi bayo,
el rayo será mi mentor.
Crearé memorias para seguir avanzando
Y si es necesario regresaré hacia atrás
Para darme cuenta de
lo que he avanzado
De donde ya he llegado.
Para no echar pasos atrás
Para recordar lo mucho que
me ha costado llegar.
Crearé un espacio ideal para mí,
Crearé un escudo
para protegerme y marchar.
Avanzaré y lucharé sin dudar
Para librarme del yugo y avanzar.
Crearé un muro, para sostenerme
Y dejar de caer en pedazos ante la vida,
Enfrentaré la triste realidad,
De no tener en quién confiar.
Crearé un mundo en el cual no tenga miedo,
Y así, poder mirar de frente a donde habito,
Dónde mi seguridad pese más
que la inestabilidad.
Diana Susana Hernández Cordero
Lic. en Lengua y Literatura
Hispanoamericanas
9 de abril, todo se paralizó,
un lugar donde se supone que
había sido buscada
Se encontraron huellas,
se encontraron manchas,
La luz apagada dentro de una fosa hallada
Debanhi había sido encontrada,
Había sido por fin escuchada.
De esa luz que había sido agotada,
no había derrames de sangre,
mucho menos sospechas, aún no había dolor,
se necesitaba que algo alzara la voz por ella
que algo la virilizará.
La búsqueda se dio enseguida,
después de una realidad, que hiciera
revelar la verdad sobre aquella luz
que había sido ocultada
en tinieblas y oscuridad.
Se escuchaba en gritos de dolor,
se escuchaba en gritos de
desesperación ¡Debanhi!
Una fecha más, una fecha
En la cual se ha perdido una luz,
En la oscuridad de la noche
Donde se creía que quizás podía
Estar segura, pero en un parpadeo
Todo se apagó de ella.
Julio César Vara López
Lic. en Pedagogía
Míralo vos a mitad de septiembre y el otoño arrecho se asoma por el Cañón del sumidero, parece que tiene jiribilla y con incredulidad en la tarde nos manda a todos a tomar café al parque de la marimba, bien sabe que con lluvia nos va a dar la bienvenida, a toda la colochada apishcagüada va a dejar, cuando el calor se haga presente a todo tuxtleco al mercado del centro va a mandar a su pozol arrecho tomar, pues el cambio de clima cada vez más totoreco está.
Brissa Marisol Morales Morales
Lic. en Lengua y Literatura
Hispanoamericanas
La esperanza se mantiene después del quiebre,
porque ella es una mujer tan frágil y tan fuerte,
tan audaz y valiente, sensible pero ardiente,
llena de una ilusión, que el dolor hiriente se desvanece
y desde entonces, se dice así misma
¿Te agotaste de ver el mundo diferente?
José Manuel López Méndez
Lic. en TICAE
Soy peregrino
en este inmenso mundo.
Con fe y esperanza
en un destino divino.
Voy en una travesía
que no sé cuándo se acabará,
pero seguiré caminando
sin descansar,
hasta llegar a mi hogar celestial.
Soy un caminante
en busca de nuevos horizontes,
como ave de paso
en este viaje de la vida
hoy estoy aquí,
mañana quizás
ya no lo esté,
pero en cada paso que doy,
dejo huellas en mí caminar.
Mi camino se extiende
sin fronteras,
hacia un destino único,
donde cruzaré
la frontera de la vida
para morir
en el reino celestial,
donde me encontraré
con mi Dios,
en un eterno gozo y paz sin igual.
Martha Pricila Aguilar Castellanos
Lic. en Comunicación
Cada que te veo llegar mi corazón
no deja de palpitar.
Demasiado rápido para tan poco
tiempo que tenemos.
Han pasado varios años
y mi corazón te sigue eligiendo.
No sé por qué.
Solo sé que en tus brazos encuentro
tal calidez.
Me siento en casa cuando te veo.
Siento que nada falta cuando te siento
y siento que todo se detiene cuando te beso.
Así de efímero es el momento que nos vemos.
Pero así de eterno es lo que siento.
Cuatro años han pasado.
Los cuatro años me he enamorado
de distintas versiones de ti.
Los cuatro años te he sentido tan lejos
y tan cerca.
Cuatro años.
Parece mucho, pero es tan poco comparado con los años que quiero seguir viéndote.
Viviéndote,
Sintiéndote,
Queriéndote.
Y sé que no importa cuántos años pasen.
Mi corazón siempre seguirá buscándote.
Mis manos seguirán tratando de encontrarte.
Y mis labios seguirán tratando de nombrarte.