Rafael Humberto Gómez Jiménez

Licenciatura en Comunicación.

Esta no es una carta de despedida.

Hace 4 años una nueva generación emprendía el camino por la carrera de comunicación, entre sueños, objetivos y metas, las expectativas no se hicieron esperar.  Es que Humanidades no es solo una facultad, recorrer sus pasillos, platicar con el personal académico, probar la exquisita sazón de doña Pipis en sus antojitos, degustar el pozol y los chilaquiles de la cafetería, las pláticas en la ‘higuera’ o simplemente admirar los árboles frente a la plaza cívica, acompañado de un buen libro y amigos, cambia tu panorama formativo y ves reflejada a la institución como tu segunda casa.

De mi paso por la facultad, hay muchas historias, experiencias y aprendizajes que valdrían la pena destacar, sin embargo y no como forma de modestia, quisiera rescatar aquello que fue y será lo más significativo que me ha dejado estos años en mi formación.

  1. Todos somos diferentes y hemos aprendido a respetarnos.

 

  1. Celebrar las victorias del otro.

 

  1. Idealiza tus propias metas y sueños.

Hoy que vivimos en esta nueva normalidad, puedo asegurar que de esta generación nunca imaginamos llevar nuestro último semestre a distancia, que nuestros maestros y compañeros se convertirían en chats y foros virtuales, que los salones los anhelaríamos tanto como a nuestro hogar. Es en esta lejanía cuando se extraña el pequeño espacio en humanidades, mis amigos, compañeros y docentes, mi otra familia.

Finalmente quiero decirte ¡Gracias Humanidades! Por acoger una temporada más, las metas y sueños de jóvenes que imaginan un mejor futuro, de profesionistas que visualizan un país más justo y con mejores oportunidades.